Reseña: Soñar bajo el agua

¡Buenas tardes! En este día caluroso os traigo la reseña de un libro que ha salido este mes y que a mí me ha sorprendido muchísimo, se trata de Soñar bajo el agua de Libby Page, una historia de ficción contemporánea que ha publicado Suma de Letras para disfrutarla este verano.

Rosemary es una viuda de 86 años que ha vivido en el barrio de Brixton, en Londres, toda su vida. Allí ha visto cómo cerraba la biblioteca en la que trabajaba y cómo la frutería se convertía en un bar de moda. Cuando la piscina local a la que acude desde que era una niña, y en la que se enamoró de su marido, se ve amenazada también, Rosemary sabe que este puede ser el principio del fin.

Kate es una joven reportera del periódico local y desde que se mudó a Londres se encuentra perdida en una ciudad que siente demasiado grande... y demasiado hostil. Pero cuando, con la ayuda de un encantador fotógrafo, Kate investiga un poco en la historia de la piscina de Brixton se da cuenta de que esta es la oportunidad que ha estado esperando.

Porque, juntas, Rosemary y Kate están dispuestas a resistir y a demostrar que la piscina no es solo un lugar para nadar. Es el corazón de una comunidad y harán lo que sea para protegerla.

Porque, para cambiar las cosas, algunas veces tienes que nadar contracorriente.

Soñar bajo el agua es una historia que me ha sorprendido en muchísimos aspectos, para empezar la trama transcurre de una manera muy tranquila, sin sobresaltos, tanto es así que yo al principio le vi demasiada introducción aunque luego me di cuenta que era totalmente necesario para la historia, no es que sea muy compleja pero sí que engancha, la forma de escribir de la historia hace que desees saber más y los saltos en el tiempo que te transportan a la anterior vida de las protagonistas, en especial de Rosemary, ayudan a emocionarte en cada momento y a que entiendas el gran valor sentimental de la piscina. Además trata temas tan importantes como la amistad, lo fuerte que puede llegar a ser y como une a las personas en los momentos más difíciles, el amor en todas sus formas y la superación de los momentos difíciles y las situaciones que consumen.

Los personajes también han sido un gran acierto, desde los principales a los secundarios, todos aportan su granito de arena a una historia que sin ellos no sería la misma. Rosemary es una anciana adorable que sabe luchar por lo quiere, que no se rinde y que ayuda a todo el que lo necesita sin que ella se dé cuenta. Kate es una joven entregada, que consigue sacar una gran fortaleza interior y que aprende a superar sus miedos e inquietudes y a ver el mundo de otro manera. Junto a ellas están personajes como Jay, Erin, Ellis, entre otros, que las ayudan en sus propósitos y mejoran tanto la trama como la vida de las protagonistas.

El final es realmente bonito aunque tiene un punto algo triste que desde mi punto de vista ha estropeado un poco el libro, un toque amargo que quizás guste a mucha gente pero a mí, que me encantan los finales felices y un tanto perfectos, me ha fastidiado pero, realmente, no es gran cosa.

En conclusión es un libro muy bonito, en el que no transcurren muchas cosas pero que hace que ames a la piscina, a sus protagonistas y que veas el paso del tiempo. Solo le he visto un pequeño fallo al final pero aún así ha sido una gran lectura y la recomiendo a todo aquel que quiera despejarse, relajarse y sin duda alguna, para el verano, ya que la ambientación es perfecta para esta época.

¡Nos leemos!